La importancia del ultrasonido estructural en la gestación

Introducción

Durante el embarazo, cada consulta es clave para confirmar que todo evoluciona de manera adecuada. El ultrasonido se ha convertido en una herramienta indispensable para el control prenatal, al ofrecer información precisa sobre su crecimiento y desarrollo. Dentro de estos estudios, el ultrasonido estructural ocupa un lugar central al evaluar la formación de los órganos y detectar oportunamente posibles anomalías.

¿Qué es el ultrasonido estructural?

El ultrasonido estructural —también conocido como ultrasonido morfológico o de segundo trimestre— es un estudio especializado que evalúa de manera detallada la anatomía de bebé. Su objetivo principal es revisar que los órganos y estructuras del cuerpo se estén formando de manera adecuada. Durante esta exploración, se observan el cerebro, el corazón, la columna, el abdomen, las extremidades y otros órganos vitales, además de verificar el crecimiento fetal, la placenta y el líquido amniótico.

Beneficios y razones para realizarlo

  • Detección temprana de malformaciones: permite identificar la mayoría de los defectos estructurales mayores.
  • Evaluación del crecimiento fetal: ayuda a confirmar que el bebé crece de acuerdo con lo esperado para su edad gestacional.
  • Información para la familia y el equipo médico: contar con un diagnóstico oportuno abre la posibilidad de un mejor seguimiento, intervenciones prenatales en algunos casos y preparación del equipo de salud para el nacimiento.
  • Tranquilidad para los padres: recibir información clara y confiable sobre la salud de bebé ayuda a disminuir la ansiedad natural del embarazo.

Limitaciones

Aunque es una herramienta muy poderosa, el ultrasonido estructural tiene limitaciones. No todos los problemas de salud o malformaciones pueden detectarse antes del nacimiento, y la visibilidad depende de factores como la posición del bebé, la cantidad de líquido amniótico o las características físicas de mamá. Además, no sustituye otros estudios prenatales como análisis de sangre o pruebas genéticas.

¿Cuándo se debe hacer?

El ultrasonido estructural se realiza generalmente entre las 18 y 22 semanas de embarazo, cuando se han desarrollado ya los principales órganos y estructuras, lo que permite una evaluación precisa. En ocasiones especiales, el estudio puede realizarse antes o repetirse después, según las necesidades de cada embarazo y la valoración médica.

Conclusión

El ultrasonido estructural es un estudio clave para cuidar la salud del bebé y brindar información valiosa a los padres y al equipo médico. Realizarlo en el momento adecuado y por especialistas permite detectar oportunamente alteraciones, planear el seguimiento y, sobre todo, ofrecer tranquilidad a la familia.


Bilbiografía

  1. Buijtendijk, M. F., et al. “Diagnostic accuracy of ultrasound screening for fetal structural anomalies before 14 and 24 weeks’ gestation in low-risk women: a systematic review and meta-analysis.” Ultrasound in Obstetrics & Gynecology, 2024.
  2. Al Suwaidi, H. H., et al. “The fetal anomaly screening scan: an international perspective.” Ultrasound in Obstetrics & Gynecology, 2024.
  3. Jabaz, D., et al. Sonography 2nd Trimester Assessment, Protocols, and Techniques, capítulo sobre el ultrasonido estructural. NCBI Bookshelf, 2023.
  4. Moore, J., et al. “Ultrasound prenatal diagnosis of structural abnormalities.” Prenatal Diagnosis / Fetal Medicine, 2009.